Cuando pensamos en el diseño de nuestro jardín es habitual que pensemos en colores, lomas, canteros, arboles, flores, etc., pero hay un integrante que no podemos dejar de lado…el perfume.
El olfato es uno de los sentidos que en general pasa desapercibido, ya que no lo registramos hasta que estamos en medio de un campo de flores perfumadas o elegimos un perfume ya sea para el cuerpo o la casa. Este sentido es de los más arcaicos, el estímulo se registra en el cerebro en una zona donde se configuran los recuerdos que se guardarán a largo plazo.
Yo recuerdo claramente el perfume de los jazmines y azares en la casa de mi abuela paterna, que invadían no solo el parque sin cada rincón de la casa, ya que los cortaba y ponía en pequeños recipientes en distintos lugares. Las tardes con olor a pan tostado en mi casa de lomas, el aroma al rosal blanco de mi papá que aun perfuma el pequeño jardín y los tilos de la vereda…inconfundibles.

Es por esto que una fragancia nos puede llevar a registrar ese momento como una postal de un lindo recuerdo.
Las flores pueden darnos su perfume, no solo de día en pleno solo, sino que hay otras en las que el rocío y el atardecer es su mejor momento (dama de noche, cestrum nocturnun, floripondios…)Los floripondios lo hacen de noche, esto se debe al tipo de polinización que tiene cada una de esas plantas.
Las distintas especies de Jazmines ( Gardenias – Jasminum), florecen en general con flores blancas, llamativas y muy perfumadas. Son arbustos o trepadores, que desde fines de invierno y durante toda la primavera nos dan generosamente sus flores y perfume.
Para el caso de los árboles, los tilos, aromos, prunus , robinias ,magnolias y eucaliptus son los principales exponentes del perfume. Quizás no tienen en algunos casos flores muy llamativas, sino grupos de inflorescencias muy perfumadas en general en primavera.
Con las estas plantas podemos enmarcar senderos, recorridos y crear sectores de descanso o lectura con un entorno perfumado. Para esto hay que planear bien el momento de floración de cada una de las especies que se eligen, evitando por ejemplo perfumes muy fuertes o no tan agradables cerca del paso o áreas de descanso. Como así también hay que tener en cuenta que en jardines pequeños los aromas quedarán más retenidos. Y para el caso de ventanas cercanas a las cocinas o cuartos podríamos usar especies con perfumes más delicados pero que se perciban tanto las flores como el perfume desde el interior de la casa.( lavandas, salvias, perovskias, narcisos..)

Algunos caso para destacar: las rosas ya sean de pie alto o bajo, floribundas, iceberg, trepadoras, etc, todas aportan tanto color, como perfume, transmiten sensación de pureza y romanticismo. Las lavandas relajan, tranquilizan; los naranjos y azares darán ese perfume que nos quedará en el recuerdo, olor a bebè, y en sus hojas transmiten un aroma cítrico inconfundible, dando un toque salvaje y tierno a la vez. Cerca de la cocina, aromáticas, como canela, salvias, romero , orégano, albahaca, menta serán el sello de la casa y la cocina casera.
La idea es poder planificar el jardín y sus floraciones y con ellas los perfumes a lo largo del año, ya sea dentro y fuera de la casa. Entendiendo que el jardín debe ser un ambiente más de ella.
Solo resta animarse, entender el lenguaje de las plantas y flores, y hacer las elecciones correctas para cada sector del jardín, espero poder ayudarlos a lograrlo… Cuenten con eso.

Ing. agr. Silvina Papa- sil_papa@yahoo.com.ar. 1544921137